50 años de 100 años de soledad

EL ROLLO
No es que esté incomunicado, es que no me gusta la gente. Prefiero  esconderme en los vastos rincones de mi mente pensando en mis problemas sin hacer caso a los demás porque, qué es más importante ¿mis problemas o los de un inmigrante perdido en medio de Hungría? Claramente los míos. Yo no entiendo a los que intentan arreglar el problema de los inmigrantes. No podéis, les digo, para qué intentarlo. Mejor ocúpate de ti mismo y te irá mejor.  No es que sea egoísta no, es que soy pragmático.
Borja Luengo Molero (3º ESO)

No hay comentarios:

Publicar un comentario