LA GRAN PESADILLA SIRIA
Yo vivía en España, pero por cuestiones de dinero tuve que trasladarme con mis padres a Siria. Cuando llegué allí, era un horror había cabezas por el suelo y la gente dormía encima de alfombras y la comida estaba en malas condiciones. Allí, me hice amigo de dos niños, uno de ellos llamado Muhamad. Cuando tenía 4 años se acercó a un barril de gasolina y le explotó, logró sobrevivir pero tenía muchas quemaduras graves y se quedó ciego. Otro de ellos, Iqbal no había visto la playa desde hacía dos años, nada más que en patera, intentando sobrevivir.
A la mañana siguiente, cuando me desperté vi que no estaban mis padres, así que decidí ir a buscarlos por el camping. Como vi que no aparecían por ningún lado, me dio por ir a buscarles al Foso, donde depositaban todas las cabezas. Para mi desgracia allí estaban, por lo visto habían salido a pedir comida y allí unos protestantes con unos cuchillos les mataron.
ANÓNIMO
No hay comentarios:
Publicar un comentario